El 'cometa diablo' del tamaño de una ciudad que se dirige a la Tierra pierde sus icónicos cuernos y se vuelve verde después de la última erupción volcánica.

La última erupción del cometa criovolcánico 12P/Pons-Brooks, que realizará su mayor aproximación a la Tierra el próximo año, muestra que el objeto helado puede haber perdido para siempre sus icónicos cuernos de diablo.

El enorme "cometa diablo" volcánico que corre hacia el sol puede haber perdido los cuernos distintivos que le valieron su siniestro apodo. La semana pasada, después del último y más violento estallido del cometa hasta el momento, sus característicos picos en la cabeza no aparecieron como lo hicieron en erupciones anteriores. Pero los astrónomos han detectado varias características nuevas del cometa, incluido un raro tono verde y una misteriosa "sombra".

El cometa 12P/Pons-Brooks (12P) es un enorme cometa de 17 kilómetros (10,5 millas) de ancho que está en camino de realizar su aproximación más cercana a la Tierra durante más de 70 años el próximo verano. El cometa 12P es un cometa criovolcánico o volcán frío que consta de una capa o núcleo helado, lleno de hielo y gas. Cuando el cometa absorbe suficiente radiación solar, sus entrañas heladas, o criomagma, se sobrecalientan. La presión aumenta dentro del núcleo hasta que la cáscara se resquebraja y las entrañas heladas del cometa salen disparadas al espacio. Después de una erupción, la coma del cometa (una nube borrosa y reflectante de criomagma y polvo) se expande y hace que el cometa parezca mucho más brillante para los astrónomos, ya que refleja los rayos del sol.

Hasta ahora, 12P ha tenido tres erupciones importantes: el 20 de julio, cuando se le vio explotando por primera vez en 69 años; el 5 de octubre, cuando entró en erupción aún más vigorosamente; y en Halloween (31 de octubre), que fue un arrebato menos intenso. Cada vez que el cometa volaba su cima, su coma se expandía adquiriendo una forma irregular con una "carril oscura" que hacía parecer que le habían crecido un par de cuernos.

El 'cometa diablo' del tamaño de una ciudad que se dirige a la tierra pierde sus icónicos cuernos y se vuelve verde después de la última erupción volcánica.

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